Las infraestructuras gasistas son necesarias para el desarrollo de hasta 270 bcm de gases renovables en 2050 y alcanzar un sistema energético descarbonizado y basado en energías renovables al menor coste

18 marzo 2019

• Según el estudio publicado hoy, la combinación de hidrógeno y biometano con electricidad es la vía óptima para descarbonizar el sistema energético y que, progresivamente, toda la energía sea renovable.

• El uso de alrededor de 2.900 TWh, en torno a 270 bcm (equivalentes en gas natural), de hidrógeno verde y metano renovable a través de la infraestructura de gas existente en Europa, supondría un ahorro anual de 217.000 millones de euros en 2050, en comparación con un sistema energético con mínima presencia de gas.

• Una reducción sustancial de los costes de producción del hidrógeno, biometano y metano sintético es posible.

Hoy se publica un estudio realizado por Navigant para el consorcio Gas for Climate que da continuidad al estudio publicado el año pasado y que amplía, en gran medida, el alcance del análisis realizado.

Para lograr una reducción del 100% de los gases de efecto invernadero se requieren grandes cantidades de electricidad renovable, si bien la forma más eficiente de descarbonización consiste en combinar electricidad con gases renovables como el hidrógeno y el biometano. El gas renovable añade valor en los sistemas de calefacción de edificios, en la generación de calor de alta temperatura para la industria, en el transporte pesado y aporta flexibilidad en la producción eléctrica basada en energía eólica y solar.

El uso de alrededor de 2.900 TWh, en torno a 270 bcm de metano e hidrógeno renovables, en combinación con electricidad renovable supone un ahorro de 217.000 millones de euros en todo el sistema energético en comparación con un escenario de mínima presencia de gas. Las infraestructuras gasistas existentes son indispensables para transportar este gas renovable y el gas bajo en carbono hacia los sectores de demanda. Así pues, las infraestructuras gasistas podrán utilizarse para transportar hidrógeno y biometano en 2050.
Los expertos de Navigant prevén que el hidrógeno azul (hidrógeno neutro en carbono producido a partir de gas natural con captura y almacenamiento de carbono) adquirirá importancia en la fase inicial y servirá para consolidar el mercado de nuevas aplicaciones del hidrógeno. Hacia 2050, una creciente  proporción de electricidad renovable y la reducción de costes propiciarán la progresiva sustitución del hidrógeno azul por el verde, hasta lograr un sistema energético completamente renovable.

Los Consejeros Delegados de los nueve miembros del grupo Gas for Climate han realizado la siguiente declaración conjunta: «El nuevo estudio de Gas for Climate revela que el gas y las infraestructuras gasistas junto con las eléctricas serán cruciales en el futuro sistema energético descarbonizado. Apoyamos un sistema energético totalmente renovable en el que el biometano y el hidrógeno verde desempeñen un papel esencial, combinados con la electricidad renovable, y consideramos que el hidrógeno azul puede acelerar los esfuerzos de descarbonización en las próximas décadas».

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